MITAD CRÍTICO, MITAD PESIMISTA
A mí no paran de decirme (los que menos) que sea positivo ante las adversidades, que son muchas, de la crisis. No es igual contestar yo que alguien que espera todo angustiado al secretario judicial que le va a quitar el piso que con tanto sudor pagó religiosamente durante muchos años, hasta que una puñetera burbuja inmobiliaria explotó y se llevó con ella a medio país por delante. Aclarado que la profesión va por barrios, nadie sabe a ciencia cierta