EL PRECIO DE LAS VIDAS
Son unos auténticos descerebrados los que fichan a un jugador de fútbol por una cifra escandalosa de millones, porque ponerle precio a las vidas, mejor para unos y peor para otros, es la mayor miseria contra la que viene inútilmente luchando la humanidad desde el día número uno de su existencia. Tener dinero, que en España es más de boquita que real, no te da patente de corso para comprarlo todo, crear desigualdades y miseria, arrasar pueblos indígenas, joder