El mucho dinero que tiene la Asociación de la Prensa de Cantabria (APC) ha destrozado la profesión. El 31 de marzo, dos días después de la huelga general, los periodistas de cantabria asociados tuvimos una asamblea general. Uno de mis compañeros, el gran periodista, maestro de periodistas, ex director de El Diario Montañés, Manuel Ángel Castañeda, tuvo la genial idea de que la APC reparta el mucho dinero que tiene en caja entre las asociaciones sociales y civiles que más lo necesitan, que son muchas. De esta manera, y apoyo a Castañeda, la profesión, partida ahora por la mitad, empezaría una nueva andadura desde cero, pero ya sin tanto dinero que casi siempre produce tentaciones, rencillas, envidias y odios. ¡Fuera a todo esto, que se reparte el dinero de la APC, ya!