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REVISTA PANORAMA LABORAL

Entrevista a Miguel del Río

Por Romina Molina.                                                                    
 «Se puede decir que el Protocolo llegó a mi vida. Hace 25 años, que es cuando empecé a trabajar de manera institucional en esta profesión, no había publicaciones, ni cursos, ni mucho menos estudios especializados como ahora. Yo dirigía un departamento de Protocolo, Relaciones Institucionales y Comunicación. Todo estaba en pañales y, desde las experiencias que me fueron surgiendo, y otras que  ya conocía en materia de comunicación, me puse a trabajar e libros de protocolo y comunicación que sirvieran de herramienta práctica a otros que empiezan. Creo que me impulsó que no se sintieran tan desamparados de información y conocimientos como nos pasó a muchos profesionales que empezamos a mediados de los años 80″.  3-MIGUEL-DEL-RIO
¿Sería importante comenzar a hablar de Protocolo desde el colegio, no?
Sí, el Protocolo hay que llevarlo a los colegios llamándolo “Urbanidad”, “Civismo”, “Vivir enSociedad”. Nos estamos deshumanizando a pasos agigantados. Parece que algunos son maleducados por naturaleza. La salvación está en los chavales. Los colegios dan muchas asignaturas importantes, para conseguir de los estudiantes un aprendizaje general de materias. Olvidan completamente la educación, a secas, incluso en el trato entre profesores y estudiantes. Trasladado este «cero en educación» de los colegios al resto de la sociedad, parece que vivimos más en una selva más que en ciudades. No deja de ser casual que cuando se produce un gesto humano, que tendría que ser habitual y corriente, se convierte de inmediato en noticia de relieve en los medios de comunicación. Algo falla.
¿Por qué cuesta tanto respetar las “normas básicas” del protocolo?
Cuesta respetar el protocolo, las normas básicas como dice usted porque no hay una educación previa. Es precisamente lo que decía antes. Ahora, se produce una cuestión curiosa: a todo el mundo parece encantarle el protocolo, y cuando organizan algo familiar, algún tipo de acto, lo hacen de una manera en que queden claros y “bonitos” todos los aspectos y detalles. Piensan que esto es protocolo. Algo de protocolo puede tener, pero para hacer bien un acto protocolario de verdad, la persona que lo organiza tiene que tener, además de una preparación, una personalidad que tienda por supuesto a la educación constante, a la sencillez, a no hacerse notar en exceso. Las personas maleducadas metidas en el protocolo como organizadores, profesionales o incluso personalidades, resulta una combinación fatal.
¿En qué se diferencia la comunicación en tiempos de crisis?
Los medios de comunicación lo están pasando muy mal en esta crisis. Están agobiados por los malos resultados y números rojos, y además están excesivamente ansiosos porque todos los días quieren sacar algo nuevo para no perder más lectores en el papel, los periódicos, y no bajar cifras en Internet, donde la publicidad funciona mejor que en los medios tradicionales como periódicos y revistas. Ahora, es más difícil llegar desde un gabinete de comunicación de una empresa o una institución a los medios decomunicación, especialmente los impresos. Buscan otro tipo de noticias, no las de siempre. Se están esforzando realmente para reencontrarse con el lector, para que vuelva a comprar el periódico y contar con publicidad, como antes. Para ello, nada mejor que las noticias de contenido social, ciudadano, que calan, que llegan a la gente. Las noticias aburridas de siempre les hacen gastar papel, trabajo de periodistas profesionales, y eso es muy caro y nada rentable. En crisis, los medios no paran de reflexionar sobre las noticias y también las opiniones que quieren los lectores, y es lo que potencian. En definitiva, la combaten con creatividad. Pero esto para los gabinetes de comunicación y los jefes de prensa es un problema. ¿Cómo cuelo mi noticia? Es un dilema muy difícil ahora.
 ¿Cuáles son los errores más comunes a la hora de comunicar?
Dice un buen amigo mío que hay dos formas de comunicar: bien y mal. Por regla general se hace mal. ¿Por qué lo digo? Porque te lo cuentan y lo denuncian los propios periodistas de los medios de comunicación. A ellos, les inundan de notas de prensa, de ruedas de prensa, y luego esperan que se le dé un alcance a esa noticia que, por supuesto, no tiene. Regla número uno: comunicar poco, pero hacerlo muy bien, con impacto, que la noticia que vendemos se recuerde, que el tema quede realmente bien. Regla número dos: hay que tener un contacto permanente con los medios y los periodistas, una relación fluida. Desde muchos gabinetes de prensa apenas se conoce directamente a los periodistas, incluso, aunque cueste creerlo, no se les trata, no se habla con ellos directamente. ¿Así esperamos ver nuestras noticias en los medios y que encima aparezcan bien?
¿Y en la comunicación virtual?
 Imagino que con comunicación virtual quiere usted hablar de Internet, de Redes Sociales. ¿Qué es lo que tiene en común un periódico en papel de un periódico digital que se lee a través del ordenador o del ipad? Pues que detrás de ambos hay personas; hay contactos con los que tenemos que tratar los temas; llegar a acuerdos; y que nos traten y publiquen en condiciones. Los grandes periódicos tienen a su vez grandes ediciones digitales, que cada vez se van “acotando” más para que terminen siendo de pago (puedes acceder a unas noticias pero a otras no). Este es un periodismo serio y comercial. Como todo en la vida, hay muchos pequeños productos virtuales que desaparecerán porque no llevan contenidos atractivos. Insisto en los contenidos, porque el lector se ha vuelto muy selectivo, sabe lo que quiere y dónde encontrarlo mejor. Internet es ya muy conocido, pero cada día se renueva de contenidos. El que más tenga, mejor le irá.
Con respecto a esto último, ¿cree que las nuevas tecnologías tienen un impacto negativo en el protocolo de comunicación?(Si entro a la verdulería digo: “buen día”, pero si me comunico virtualmente no saludo).
Da usted en el clavo. La falta de educación, de cortesía mínima es más patente en Internet, y no digamos en las Redes Sociales. Quien no sabe escribir una carta (muchísima gente y los jóvenes más), ¿cómo van a comunicarse bien a través de un simple correo electrónico? Lo hacen fatal, incluso diría que en ocasiones de manera ofensiva. Hay que potenciar la educación y los cursos para escribir bien en Internet, en las Redes Sociales y tener unas reglas. A quien no se conoce de nada, no se le “entra” sin más de forma directa rayando en lo grosero. Hay que tener las mismas consideraciones que plasmamos en una carta: comienzo adecuado, trato adecuado y final adecuado. Otra cuestión que me llama la atención es la costumbre de muchas personas de no contestar cuando reciben un E-mail. Es el colmo, pero es una realidad constante.
En la comunicación empresarial: ¿cuáles son los errores más comunes y que deberíamos evitar?
  La comunicación empresarial puede tener sus especialidades. Me refiero a que unos fabricarán pan y otros piezas metálicas, pero la comunicación tiene cuestiones comunes que es necesario tener en cuenta. Hoy por hoy, la denominada comunicación empresarial la llevan a cabo sus grandes organizaciones donde están agrupados por el sector al que pertenecen (metal, construcción, etcétera). De por sí, las empresas no se meten, así por así, a crear o hacer su propia comunicación, aunque para ello tengan la facilidad de contar con una agencia externa o un profesional que se lo lleve a cabo. Creo que esto último es el error: invierten poco o nada en comunicación, invierten poco o nada en publicidad, invierten poco o nada en marketing e invierten poco o nada en nuevas tecnologías.
 Vivimos en una sociedad multicultural, ¿cómo afecta esto en la comunicación empresarial?
Las sociedades multiculturales tienden a tener o contar con sus propios medios de comunicación, ya sea en papel, radio y, especialmente, Internet. En España van creciendo, sin duda. Estos medios escritos en los idiomas de origen de los colectivosciudadanos que conviven en España tienen sus propios periodistas y maneras de hacer periodismo. A nuevas empresas que surgen de manos de inmigrantes, lo que más les interesa es captar negocio entre sus compatriotas y de ahí que se potencien más en estos medios que en los nacionales del país donde residen y explotan sus negocios.
Usted ha sido responsable del Gabinete de Comunicación del Parlamento de Cantabria, ¿cuáles son las funciones que se desarrollan en este puesto?
 Cuando eres director o jefe de prensa de una institución o una empresa, ante todo tienes que velar por el mantenimiento, e incremento si cabe, de su prestigio. No sólo está aparecer en la prensa, radio, televisión e Internet y Redes Sociales, y hacerlo bien.También tienes que saber reaccionar en los momentos malos, en la comunicación de crisis, porque te vas a encontrar con muchos momentos desagradables donde una mala noticia te puede hacer mucho daño. En definitiva, el jefe de prensa está para informar, para atender lo mejor que pueda a los medios de comunicación y a sus periodistas, y para velar por el prestigio de la institución o empresa para la que trabaja. Creo que hasta que no tienes un problema gordo, no te haces un auténtico director de comunicación. A partir de ese mal trago y lo que dure la polémica, es cuando trabajas con una mente más fría,  ¡vamos que reaccionas mejor a determinadas noticias! En todo caso, en los malos momentos hay que reaccionar y pronto, no estar callado ni parado.
¿Qué lo motivó a crear la Asociación Cántabra de Protocolo?
 La agrupación o asociación de profesionales siempre es buena. Existen colegios profesionales de casi todo. Algún día lo habrá de los profesionales del protocolo, con unos estudios y prácticas bien definidas, es decir, que se cumplan unos requisitos para estarcolegiado. Las asociaciones son embriones de lo que llegará algún día, porque los estudios de protocolo en España tienen ya hoy una gran importancia y van para arriba.
¿Qué lo llevó a escribir “Manual para comunicar bien. ¿Vas a publicar lo que te he enviado? “, donde no solo el contenido es especial sino también su formato (dado que parece un manual de estudio).
 Usted lo dice bien, el libro Manual para comunicar bien. ¿Vas a publicar lo que te he enviado? está escrito desde la idea de servir al lector, de aportar, de informar, de contar como me fue a mí, cómo lo hago yo, no porque lo que yo haga sea lo mejor, no, insisto, escribo para aportar práctica. Eso sí, cuando en un texto de este tipo lo das todo, lo entregas todo, es cuando la gente reconoce que tiene entre sus manos un texto del que aún puede aprender determinadas cuestiones, en este caso sobre la mejor manera de comunicar y que los medios te hagan caso. La comunicación tiene su lado bueno y su lado malo, los rumores, el daño, la calumnia, el buscar hacer daño, y esto también lo saco a la palestra para contrarrestarlo. 
¿En qué se diferencian sus libros de los de temática similar?
 En todos mis libros, sean de protocolo, gabinetes de prensa o de comunicación, he actuado de la misma manera: contar todo lo que se, lo mejor que se. No es un juego de palabras. Antes, yo me había encontrado con textos de mucha teoría pero que a la hora de poner algo en práctica me servían más bien poco. En cada nuevo proyecto, me propongo tener una idea original, publicar algo nuevo, que no existe en el mercado editorial sobre las materias que abordo hoy por hoy. Luego, espero la reacción de mis lectores y lo que me escriben o me dicen. Para mí, lo más importante, es poderles ser de utilidad y me llena de satisfacción que alguien me escriba y me diga que tal o cual libro les ha aportado algo, un poco o mucho.
Me llamó mucho la atención la presentación de su último libro: “Abecedario gráfico de comunicación y organización de eventos”. ¿A quién está dirigido?
Mi último libro se conoce ya más como “Protocolo a la Vista”, porque de eso se trataba, de abrirlo y visualizar el protocolo. Lo primero que decidí fue juntar en un abecedario de la A a la Z las cuestiones que creo son primordiales dentro del protocolo, sobre todo a la hora de organizar actos o eventos. Después me dije, lo tengo que escribir de forma muy práctica, didáctica, como si fueran fichas de trabajo donde lo tienes todo, incluso la imagen de cómo te tiene que salir una firma en un Libro de Honor que tienes a la vuelta de la esquina. Al hacerlo, pensé más en los estudiantes, pero me he encontrado con muchas personas que trabajan en oficinas, fuera del protocolo en sí, que lo han adquirido porque ese abecedario contiene casi todo lo primordial para salir rápido al paso de actos y eventos conocidos y cotidianos.
Por último…¿cómo se definiría: como escritor, periodista, articulista, pensador, formador…?
 Yo lo que realmente quiero es aportar proyectos útiles. Es cierto que soy todas esas cosas con las que usted tan amablemente me define, pero pocos momentos hay tan especiales en la vida como tener en tus manos el primer ejemplar de un nuevo libro escrito por tí. Me gusta mucho escribir y me gusta mucho la formación, porque me da la posibilidad de tener un contacto directo con personas que vienen a escucharme, y de las que también aprendo, ¡cómo no! No es en absoluto otra frase hecha. Si crees que lo sabes todo ya sobre comunicación, sobre protocolo, sobre gabinetes de prensa, sobre escribir libros y artículos, estás perdido, vas por mal camino, porque no es así. Nunca se acaba de aprender de otros y, por supuesto, de los libros e Internet, la gran fortaleza del saber. 
 

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