

Cuenta atrás para cambios verdaderos
Puede que el coronavirus haya alterado cosas, como la Semana Santa, el verano o las Navidades, pero, interiormente a nosotros, no mucho. Siempre que el mundo vive un gran drama, lo siguiente es prometer cambios. Pronto volvemos a las maldades, que en este caso es el Covid-19. Sin tantas falsas promesas, bastaría con actuar más a menudo con algo que se recuerda mucho en estos días, tanto por la catástrofe viral como por los malos comportamientos. Ese algo es recuperar