Cromañones de la educación
La mala educación se extiende como una plaga. Lo peor: no tiene antídoto. Existen personas dispuestas a vivir sin pronunciar jamás el correspondiente buenos días, el gracias o el adiós. Te encuentras de habitual con estos raros, raros, raros. Es en un portal, en un ascensor o en cualquier consulta médica de la que acudimos de habitual donde te encuentras con semejantes cromañones de la mala educación. La escena se pone peor cuando les saludas por cortesía y ni se