PUERTA GIRATORIA EN LA CÁRCEL
Los que pueden, cogen las puertas giratorias que hay para ellos en las cárceles, que es lo mismo que decir que, como entran, salen al poco, y toman las de Villadiego. Son dados a hacerse fotos a la salida del trullo cogiendo la mano a algún preso de larga duración – y sin pedigrí alguno, evidentemente -, no vaya a ser que como por alguna extraña razón tengan que volver y es mejor dejar amigos tras los barrotes. Es la