Que se hable más de un prófugo instalado ricamente en Bruselas, que de los millones de españoles que demandan un empleo, denota la confusión en que nos encontramos. 2018 va a ser igual al 2017: dominará el relato manipulado. Puigdemont quiere controlarlo y con ello desgastar la cabeza, incluso de los que más fortaleza muestran. […]